sábado, 19 de marzo de 2011

OBRIGADO, LUÍS FABIANO



   Mi ídolo de juventud es y será siempre Davor Suker. El mejor futbolista que haya enfundado la elástica nervionense es Daniel Alves. El jugador más grande de su historia, messié Kanouté... pero mi debilidad es y seguirá siendo Luís Fabiano. Como en los buenos matrimonios, en la salud y en la enfermedad (que la hubo más de lo habitual), en lo bueno y en lo malo, hasta que la morriña brasileira os separe. Por esos tengo que escribir este post, aunque esté reformando el blog para la temporada que venidera, para darle las gracias por todo a LF10 (com diría Jesús Alvarado). Gracias por tus jugadas y por tus 107 goles, por tu inmensa calidad, por los títulos, por Eindhoven, por crecer y hacer grande al Sevilla FC. Un crack, un genio con sus idas y venidas, pero genio al fin y al cabo. Grande entre los grandes (5º máximo artillero de la historia sevillista), hasta para marcharse con lágrimas en los ojos. Atrás quedan tus quejas por ser suplente, tus declaraciones y las de tu representante cuando visitabas tierras brasileñas, tu mala cabeza.. todo está olvidado, eclipsado por tantas y tantas tardes de gloria. Por eso no podía faltar en tu despedida, en tu homenaje, en los prolegómenos de ese partidazo (Sevilla 1 - 1 Barcelona) que el equipo te brindó como un último recuerdo. No podía dejar pasar la oportunidad de aplaudirte lo más fuerte que pudiera junto a 40.000 sevillistas en la hora de tu adiós con tu camiseta puesta.

   Que te vaya bonito, O Fabuloso.