No le han ido bien las cosas al bueno de Antonio Álvarez en el inicio de esta temporada al mando del Sevilla FC. Si en el final de la anterior campaña, sólo sumó éxitos, en los albores de la actual se le ha dado la vuelta a la tortilla y ha acabado con la destitución del técnico marchenero. Un caballero, un sevillista que no supo reconducir a una plantilla que navega a la deriva. Las derrotas ante el Barcelona en la Supercopa y sobretodo ante el Braga en la previa de la Champions fueron suficientes para agotar todo el crédito que Álvarez se había ganado. El pobre juego ofrecido puso la puntilla, a pesar de que los resultados no fueran del todo malos en el campeonato doméstico.
Llega el profesor Manzano, con la responsabilidad y la ilusión de intentar que la afición sevillista vuelva a gozar con su equipo. Toda la suerte para el técnico de Úbeda en su nuevo reto y toda la suerte para Antonio Álvarez salvo si se encuentra con el Sevilla FC en su camino claro está.
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