El mercado empieza a moverse (Villa, Mourinho,..) y el Sevilla no podía ser menos. Tras la llegada a coste cero del lateral Dabo, lo primero era dibujar el proyecto de la próxima temporada decidiendo quién ocuparía el banquillo. Sin duda, la figura del entrenador es clave para una correcta planificación, no creo que sea conveniente ir fichando y descartando jugadores sin saber si el director de la orquesta sevillista cuenta con ellos o si se adecuan a su sistema de juego.
Por ello el club, tras unas 48 horas de reflexión, ha decidido que Antonio Álvarez pase de ser interino a ser el entrenador del Sevilla FC para la temporada que viene con todas las de la ley.
Me alegro por él, porque creo que se lo ha ganado. Si bien, nada te asegura acertar, la primera impresión es que se ha acertado renovando al marchenero.
Puntos a favor: le dio vida a un equipo muerto, lo metió en Champions, ganó la Copa, acabó con absurdos debates, es humilde y no busca protagonismo, es de la casa, cuenta y conoce a la cantera, es más barato quizás que otros con más nombre y apuesta por un fútbol atractivo.
Puntos en contra: no tiene experiencia cómo máximo responsable de una plantilla, tampoco es que haya hecho el equipo un juego muy vistoso en su hasta ahora corta etapa..
Parece que ganan por ahora los puntos a favor... ¿No?
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